En el mundo de la gastronomía, las tendencias del futuro se han convertido en un imperativo presente. El Honest Food, un concepto que plantea una contrarrevolución en la forma en que nos relacionamos con la comida.
Aunque el término no es de nueva creación, el Honest Food abarca principios que hemos escuchado durante años. Es parte de una conversación que se centra en lo que comemos y cómo lo comemos, involucrando la integridad del sistema alimentario y las decisiones de consumo de los consumidores.
Para entender el Honest Food, podemos remontarnos a 1989, cuando surgió el movimiento slow food. En su esencia más básica y sencilla, el Honest Food es una filosofía que promueve una cocina consciente del entorno en el que se encuentra, estableciendo una relación transparente con el consumidor, eligiendo proveedores de calidad y siendo responsable en términos de nutrición y salud.
En la cocina, la inmediatez no conduce a ningún sitio. Se requiere método, metodología, investigación, desarrollo e intuición. Para los profesionales de la gastronomía, transmitir la importancia de pensar y recuperar, no solo el producto, sino también la forma en que nos alimentamos a diario, es fundamental.
El concepto de Honest Food se basa en la creación de comida real, buena comida en definitiva. Utilizando procesos significativos y respetuosos en toda la cadena, desde la producción de materias primas e ingredientes hasta la elaboración final del plato.
Los cocineros y cocineras tienen la responsabilidad de enseñar a comer bien y mejor en la actualidad.
El camino del Honest Food se vio impulsado por el New Nordic Food Manifesto, un manifiesto concebido en 2004 por una nueva generación de chefs escandinavos. En lugar de buscar inspiración en países como Francia, España e Italia, estos chefs comenzaron a cultivar huertos en sus propios patios traseros, redescubriendo los productos autóctonos y la herencia culinaria local. Este enfoque resultó ser delicioso y en sintonía con las tendencias alimentarias internacionales.
El Nordic Food Manifesto, creado por René Redzepi, chef del restaurante Noma, uno de los mejores del mundo, resume en diez puntos un enfoque centrado en la pureza de los alimentos, la temporada, la ética, la salud, la sostenibilidad y la calidad de los productos tradicionales.
Ampliar los límites gastronómicos tradicionales y ofrecer alternativas innovadoras, con sentido y personalidad, es un campo abierto para el Honest Food.
Entonces, ¿de qué se trata realmente esta comida «honesta»? ¿Es una tendencia que nos lleva a una vida más saludable? ¿Son alimentos transparentes y responsables? La respuesta a las dos últimas preguntas es sí.
El Honest Food crea un discurso coherente que habla de ti y de la experiencia culinaria que quieres ofrecer o vivir. Aunque dentro de un sistema que a menudo ofrece afirmaciones falsas sobre la salud, la nutrición y la procedencia de los productos, el desafío radica en crear, comunicar y compartir.
Crear implica buscar inspiración en los métodos tradicionales que resaltan los ingredientes y la tradición de cada lugar, manteniendo la esencia de los productos y aplicando conciencia en el diseño de productos, el marketing gastronómico y los espacios de consumo.
Comunicar es fundamental para transmitir el mensaje del Honest Food, aprovechando las tendencias y la digitalización como herramientas indispensables para cualquier negocio o marca.
Compartir implica la responsabilidad social y la voluntad de hacerlo aún mejor.
En resumen, el Honest Food es una contrarrevolución gastronómica que nos invita a reflexionar sobre nuestra relación con la comida, promoviendo una cocina consciente, transparente y saludable. Es un camino que nos desafía a crear, comunicar y compartir una experiencia culinaria auténtica y significativa.
Si quieres saber más sobre este proyecto, o crees que puedes aportar, escribe a: hola@thehonestfoodcollective.org